A mí las aves en general no me convencen mucho. Son animales muy asustadizos, que mueren a menudo simplemente de un susto. Estos pájaros nos los regalaron, y no se rehúsa un regalo. Pero...
A pesar de todos los cuidados que le hemos dispensado, dándole agua con una jeringuilla, aplicando antibiótico al dedo herido...el pájaro ha muerto a media mañana. A la pena por su muerte, se añade que su hembra no para de piar, llamándolo.
Esto me hace reflexionar: qué importante es la pareja, qué importante es sentirse acompañado, y qué desolación, Dios mío, qué amargura debe sentir un ser cuando pierde su compañer@.
Dejo el pájaro en el bosque, al pie de un árbol. Voy a buscar a mi hombre y lo abrazo muy, muy fuerte.
3 comentarios:
Oh....que lastima....lo siento mucho
Si me dices cómo lo quieres, te subo un macho.
Gracias a los dos. Te lo agradecemos, Nimbus, pero no queremos más pájaros. Todo el mundo nos decía que eran muy fáciles de criar, y hemos probado con canarios, pericos y diamantes mandarines, y es un rollo. Todos son problemas y disgustos. Nos quedan tres, y mira, ya está bien. Gracias de todos modos.
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